viernes, 30 de octubre de 2009
Permanece Helada...
¡Qué fea se pone cuando llora! – pensó. Pero algo la decía que al otro lado, indefensa, no podía evitarlo.
Como quien tiene un angelito en un hombro, y al otro un diablo, se encontraba en ese instante.
El Hada, inquieta, revoloteaba de un lado a otro, hacía muecas, caras, pero no era capaz de arrancarle una sonrisa a su gélida tez.
Las lágrimas ahora eran escarcha, hielo tan duro que no dejaba articular palabra. Su pálida cara estaba inmóvil… igual que su magullado corazón. Pum- pum, pum-pum, sólo era ya, un lejano caminar.
Había dejado de latir, sin entenderse aún el por qué.
Tremenda decepción la que se llevó el otro lado…
- Pensaba que eras fuerte- murmuraba. Me prometiste que estabas curada… las tiritas que te puse… eché povidona… ¡ahora lo entiendo! el amarillento color de la misma enmascaraba la hemorragia que había en tu interior…
Ahora, pálida te veo, como muerta, sin expresión alguna, en SHOCK. Un shock profundo que roza el coma delató el médico…
- ¡Espera! No está muerta, noto algo… ¡Sus piernas tiemblan, y sus manos también!
La pobre Hada indefensa, al otro lado, gritaba en SILENCIO, chillidos MUDOS, inaudibles para todos.
Quería contarte… pero no alcanzaba palabra alguna. Su cabeza empezó a rodar…
Volvía al País de Nunca Jamás, una vez más, después de haber estado revoloteando con sus amigas las florecillas y las nubes.
De camino a casa en su burbuja, se encontró con un enorme abejorro…
“Se acercó bruscamente a mi burbuja, como si de la nada surgiera, pude verlo… tuerto, uno de sus ojos no lucía, estaba fundido (como su estúpida mente). Se empeñaba en pinchar mi burbuja, su aguijón cada vez estaba más cerca.
Eché a correr, tanto que mi burbuja iba a estallar, mis piernas temblaban, y los nervios empezaban a apoderarse de mí.
Insistente… no podía seguir, las paredes se estaban volviendo frágiles, era cuestión de tiempo que se derrumbaran sobre mí. Decidí frenar, dejé de correr, y el molesto abejorro pasó de largo peligrosamente, rozándome con su asqueroso cuerpo amarillo.
Iba en primer lugar; yo, rezagada pude observar su trasero… me resultaba peculiar, de repente una extraña sensación se apoderó de mi cuerpo.
Los nervios pasaron a tomar el timón, mi cuerpo temblaba sin control, y el sudor y las lágrimas corrían a raudales río abajo… mi burbuja perdía el control y yo no podía hacer nada, la inundación había arrasado todo.
Vinieron las ganas de vomitar, vomitar toda la rabia, todo el rencor, todo el ODIO contra ese abejorro amarillo.
Por desgracia, tuve que aguantarlo un poco más, había atasco en el cielo de mi corazón. Finalmente, como una fiera salvaje se alejó, estando más cerca de aquel, que de este lado.
Asustada, seguía inmersa en el shock, bloqueada… me faltaba el aire, me ahogaba, era toda una charca.
Por fin, pude detener mi burbuja, sin embargo, no pude detener el tembleque de mi cuerpo, no pude reanimar a mi magullado corazón, y lo peor de todo no pude olvidarle.”
Increíblemente, a través de su expresiva mirada Hada, entendió todo. Le dio Depakine para los temblores, dos ampollas de Primperán para los vómitos, y una dosis extra de adrenalina para el corazón, sin embargo… aún NO reaccionó.
martes, 27 de octubre de 2009
Paréntesis
sus piernas no responden, sus pies no la llevan donde quiere ir,
van sin rumbo en un "va y ven" sin sentido,
su cuerpo ha dejado de sentir, incluso el dolor ya es un leve cosquilleo para ella.
El golpe la dejó son sonrisa, como aquel mimo de la Calle Mayor, con la cara torcida y el rimmel corrido de tanta agua, agua que emana sin control, el chorro no se corta... sequía.
Se ha montado en la alfombra del genio y a bordo de ella se aleja de lo vanal,
¿su destino? no lo sabe, sin embargo, busca refugiarse donde nunca entró nadie.
Se encoge como una florecilla marchita y se mete en su pequeña burbuja.
Y ascendió, ascendió, (porque un extraño niño soplaba desde abajo). Allí todo es mágico, un mundo de color de rosa, en el que no hay sitio para villanos, sólo Hadas, sólo ella.
Colgó un cartel de CLOSED, pero esta vez no por vacaciones, y se dejó llevar a la merced del viento...
domingo, 25 de octubre de 2009
La Princesa con la Boca de Fresa, Fresa ÁCIDA
miércoles, 21 de octubre de 2009
Cuentos de Hadas
GRACIAS POR ESTA ENTRADA DEDICADA. By Delgaducho.
Un buen día revoloteando, Hada, chocó con el más oscuro de los árboles. Ahí estaba, frente a ella, parado, inmóvil; la observaba fríamente sin nada que decir. Ella se contorneaba de un lado a otro, no le asustaba como al resto de bichitos... buscaba su atención, sonriéndole, intentándole dibujar una sonrisa en esa cara insípida, sin expresión alguna, pero sus esfuerzos eran en vano.
El árbol, retraído, como asustado y enfadado no dejaba ver nada de su interior, y mucho menos enseñaba sus raíces, lo que le hacía crecer...
Cada día le visitaba, pero la indiferencia era ya rutina. Cosquillas, por aquí por allá... y nada, la capa de escarcha que envolvía su fría corteza no desaparecía si quiera se hacía más fina.
Ella con su luz de aquí para allá como una luciérnaga en la noche volaba fiel a su lado.
Un buen día, Hada fue sorprendida, al ir a visitarle. El árbol no se encontraba postrado en el lugar de siempre, si no que había ido a buscarla, andando sobre sus raíces, unas raíces mas vivas que nunca. Movía sus ramas de un lado a otro llamándola a gritos. Cuando Hada se acercó recibió el peor de los golpes de mano de una de sus ramas, como un en round de boxeo, cayó desplomada, aturdida... no podía creer lo que había visto.
Las palabras se torcieron, las letras se movían de un lado a otro sin parar, no encontraba la lógica de frase alguna... NO PODÍA HABLAR.
El árbol quedó mudo igual que la pequeña e inocente Hada. Los remordimientos le comían por dentro, y no para de repetir una y otra vez la misma frase:
- Lo siento, yo no quería...
Soltó al Hada en el suelo, y sólo dejando el camino marcado con el agua derretida de su escarcha, se alejó, para volver a permanecer helado, sin inmutarse por nada. Se sentía tan torpe, absurdo, él sólo quería...
Decidió esconder de nuevo su corazón y no descongelarlo nunca más.
domingo, 18 de octubre de 2009
El Cáncer y TÚ
Quiero TU abrazo suicida aunque me cueste la vida
¿Qué ciudad se te quedó en el corazón? ¿Dónde está tu casa perfecta? esa en la que "soñamos", soñé, vivir...
¿Dónde quedaron todos "nuestros", mis, sueños? Estúpidas ilusiones.
¿Por qué eras la flor más puta de mi jardín? Como un rosal, aparentemente bonito, pero escondes numerosas espinas,
espinas que me has ido lanzando a modo de misiles, que acertaron de lleno en el corazón, mi corazón.
No sabes lo que te odio,
por haber jugado con esta marioneta,
te odio, por contarle tantos cuentos para dormir a esta crédula e inocente niña.
Te odio, porque para tí no tenía ningún valor,
porque no te importaba mi dolor,
porque me mentías sin problemas, aún mirándome a los ojos, ojos que no querían abrir, mientras tú escondías mil tormentas.
Porque me dabas "todo" y nada,
porque fue un invierno sin mantas,
porque sólo era un nombre más en tu interminable lista de "logros".
Porque fuiste todo, y yo era nada...
porque fueron cuatro malditos años engañada,
porque hiciste que perdonase hasta el peor de los errores,
por traicionarme, humillarme, engañarme...... TE ODIO
Te odio por las noches que me he despertado buscándote, y tú... encontrándote con mil más.
"Y que lo curen los años, que lo alivien otros labios, será mejor partir, que desangrarme..."
¿Por qué sigo recordandote?
Me he inventado miles de historias en las que tú te vas, sólo para no reconocer que yo estoy lejos ya... fuera de tu radar, del límite de tu corazón.
Por ser la maldita rana en mi irreal cuento de hadas.
Un borrón para tu agenda, un zarpazo para mi corazón...
martes, 13 de octubre de 2009
¿Cómo decirte...?
miércoles, 7 de octubre de 2009
Incontrolable, irremediable... TÚ
martes, 6 de octubre de 2009
Escapando de sus propias cadenas
Salió corriendo, apabullada, temerosa de su sombra.
Y corrió, corrió... corrió sin mirar atrás.
Ella ya no quiere cadenas que la aten,
no quiere ser la perra fiel de ningún ESTÚPIDO MALTRATADOR.
Porque se ha llenado de fuerzas, orgullo, y ha huído de él,
cambió las lágrimas por sonrisas,
sonrisas que golpean más fuerte que cualquier puño,
dejó atrás sus recuerdos, quemó las fotos, destruyó los railes que la llevaban a su lado, ya no, ya no volvería.
La guerra no estaba ganada, ¿Cómo huir de una misma?
Obligó a su corazón a entrar en coma, un coma del que aún no quiere despertar,
un coma que le protege de todo cual escudo al caballero,
porque ahora, antes de romperse, se dobla,
ya no es tan débil, o al menos procura no mostrarse para no delatarse...
¿Te ATREVES a despertarlo TÚ?
domingo, 4 de octubre de 2009
Porque todos los finales son el mismo repetido
El frío de la soledad me atormenta, me asusta, estoy perdida.
Vago sin rumbo, viajo en un tren que no me lleva a ningún sitio.
Los raíles ya no quieren saber nada de mis sueños, y las ilusiones se quedaron rezagadas en el andén.
Mis mejillas se tornan frígidas, escarmentadas de tus mentiras luchan por sobrevivir en el océano de lágrimas que les viene encima.
Siempre quise estar a la altura pero para tí nada fue suficiente.
Miro alrededor, como una gata solitaria estoy, sólo hay soledad. Tu perfume me acompaña, tus fotografías, recuerdos... TORMENTOS.
Tanto ruido, ruido escandaloso, silencioso ruido, has ganado. Se pisaron las semillas, ya no queda nada.
"Todas las ciudades eran pocas a sus ojos. Al final, números rojos en la cuenta del OLVIDO."
sábado, 3 de octubre de 2009
El murmullo de la gente... Bla Bla Bla...
Maldito error hablar sin saber... habituados a colgar, sin poder alguno, etiquetas a la gente allá donde vais.
No sé si sentir hacia vosotros pena, rencor o simplemente indiferencia.
¿Qué os creeís?
Detrás de cada rostro hay una historia interminable de la cual, seguramente, no conoces ni el prólogo...
Sin embargo, os atreveís a comentar a la ligera... hablaís de simpleza, vacío, incluso... ¿juzgaís?
Una vez más, haré oídos sordos, no merece la pena.
Os dedicaré una frase:
"De vuestra envidia y odio, nace mi fama."
Arrebatada de la inocencia e incredulidad de golpe,
teniendo que madurar a la fuerza,
sabe de la vida más que un gato callejero...
No intentes dar lecciones, mírate en un espejo, analiza... y luego si tienes aún fuerzas y ganas criticas al resto.